Lo que resta del día, también conocida como Los restos del día, es una novela publicada en 1989 por el actual premio Nobel de Literatura, Kazuo Ishiguro. Contada desde la voz del protagonista, un mayordomo ha que sido testigo del cambio del sistema de mayordomos en las grandes mansiones o casas de Inglaterra con sus respectivos caballeros a cargo. Al igual que su padre, se dedicó toda la vida a servir, es decir, solo sabe ser mayordomo.
Ishiguro
era un autor que tenía pendiente desde hace rato, no por esta novela que no me
llamaba tanto la atención, sino por Nunca
me abandones, que la leeré dentro de un tiempo, y más porque me gustó mucho
el estilo narrativo del autor.
Imposible no usar el mundo ficcional de Dowton Abbey para
visualizar los personajes a medida que leía. Desde el mayordomo, el caballero,
las habitaciones y la campiña que rodea la gran casa, todo me llevaba a pensar
en la serie. Incluso, hasta el personaje del mayordomo y su idilio con el ama
de llaves. Por este motivo, no me sorprendió lo que cuenta de la servidumbre,
el manejo de la casa, ya que terminé no hace tanto de ver la serie completa,
que recomiendo muchísimo.
Downton Abbey mansión |
Darlington Hall es una de esas mansiones o grandes casas cuyos dueños pertenecen a la realeza. Se los conoce
como “caballeros” o “lords”. El anterior
dueño de esta casona, Lord Darlington, murió y la casa fue comprada por un
norteamericano, mister Farraday. La
narración arranca con la ausencia de mister Farraday a raíz de un viaje a
Estados Unidos y la recomendación, que el mayordomo toma como obligación,
de viajar con el auto Ford y no quedarse solo en la casa.
Durante seis días, el mayordomo recorrerá diversos pueblos,
descansando en cada uno de ellos, hasta llegar a visitar a miss Kenton, para
proponerle retome su rol de ama de llaves, debido a que la mansión, al cambiar de dueño, ya
no está en su esplendor y debieron cerrar habitaciones e ir disminuyendo el
personal.
Durante el viaje, en el año 1956, él
recuerda la época en que su padre vivía, luego de la Primera Guerra Mundial, en
pleno esplendor de estas mansiones, con sus fastuosas fiestas a las cuales
concurrían otros caballeros y miembros de la alta sociedad inglesa. Además,
piensa en lo que es un “gran mayordomo”, en las virtudes, y concluye que un gran mayordomo debe pertenecer a una
gran casa, de alguna manera contagiarse de grandeza del caballero al cual
sirve, y poseer dignidad y honor; son estas cuestiones las que conforman su
vida y con las cuales se siente feliz y seguro. No necesita más. Fue criado
para ser un sirviente, para poseer un grado altísimo de lealtad. Incluso ante
los fallos o malos accionares de los caballeros a los que sirve.
En
esta decadencia, los norteamericanos, también deseosos de participar de la
grandeza de la aristocracia, compran estas casas con sirvientes y todo. Ellos
no poseen poder y prestigio por la “sangre” sino por el dinero, siendo
prácticos bajo el auge de las transacciones comerciales. Es así que el
mayordomo, mister Stevens, pasa a servir a un norteamericano sucediéndose situaciones
en las cuales él no entiende a su señor.
Además de la crítica hacia el servilismo, hacia
los seres humanos que fueron criados para servir y no pueden construir sus
propias metas de vida más allá de complacer, se presentan diversas miradas
sobre la situación política, la democracia, el gobierno monárquico y hasta
totalitarismo nazi. Hay una escena que me impactó mucho por la discusión y
crítica sobre la democracia, de manera que uno de los caballeros expone que se
le deja al pueblo, que no entiende de finanzas ni de economía ni de política,
decidir mediante el voto sobre aspectos que no entienden.
La escritura me pareció excelente,
la forma de narrar a través de los recuerdos de mister Stevens de manera que te
habla a vos, como lector. Dejo de la lado algún que otro cliché que bien puede
ser un tema de traducción.
TRAS LOS PASOS DE MISTER STEVENS
Luego de terminar de leer la
novela, aproveché para observar los paisajes y conocer más sobre los sitios que
menciona.
Mister Stevens sale desde la misma
Darlington Hall y viaja hasta el puerto de Weymouth. Atraviesa:
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Salisbury:
Casas cerca del centro
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Dorset:
Mortimer’s Pond
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Somerset: Taunton
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Devon: Moscombe, cerca de
Tavistock
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Cornualles: Little Compton
CONCLUSIÓN
Disfruté mucho de leer esta novela
propuesta por el club de lectura del cual participo hace más de un año. Me
atrapó el estilo del autor, impecable, la manera de contar y de ir metiéndote
en otras costumbres que, para un argentino, son exóticas, ya que aquí las
aristocracias se construyen de otra manera, por el dinero y el grado de fama.
Además, la crítica a la sociedad
inglesa, las posturas y el trasfondo de la guerra me parecieron excelentes.
¿Han leído otra obra del autor
para recomedar?
Besos y buenas lecturas…
Wow! Este es el tipo de historias que me gustan. Con estilo y mucha historia. Grandes mansiones, algo de crítica y un poco de viajes... Muchas gracias por habérmela descubierto con una reseña tan completa e interesante. Me la apunto. ¡Nos leemos!
ResponderEliminarHola. espero te guste. Después podés ver la película que trabaja Anthony Hopkins y Emma Thompson, dos grandes. Me olvidé de agregar el dato a la reseña. Yo la vi hace mucho y me había encantado.
EliminarHola, Keren. A mi también me gustan mucho este tipo de historias y aunque tengamos película prefiero leer el libro al ser siempre más completos. A ver si en un futuro puedo disfrutar de este libro. Gracias por tu entrada.
ResponderEliminarUn beso.
Hola. Yo también prefiero el libro porque me gusta imaginarme los detalles. Después, me gusta comparar con las películas. En pocos casos sentí que la película era mejor que el libro como con Un pájaro canta hasta morir.
EliminarEspero que te guste como a mí. Besos!